Sin embargo muchas de las enfermedades más frecuentes en países desarrollados (Obesidad, Enfermedades cardiovasculares, Diabetes tipo II etc….) están íntimamente relacionadas con una mala alimentación y con hábitos de vida poco saludables (sedentarismo, hipertensión arterial, hipercolesterolemia y consumo insuficiente de frutas y verduras).
Todas las enfermedades descritas anteriormente acortan la vida. La obesidad puede llegar a reducir la esperanza de vida de una persona hasta en diez años. Además, suponen una elevada carga económica para los sistemas de salud. Por ejemplo, en nuestro país se calcula que los costes directos e indirectos asociados a la obesidad suponen un 7% del gasto sanitario total, lo que representa unos 2.500 millones de euros.
Unos buenos hábitos alimentarios y una actividad física regular son el pasaporte de una buena salud y por tanto, son quizás lo más importante que una persona puede hacer todos los días para proteger adecuadamente su salud.
Por muchos años se nos enseñó que la mejor estrategia para tener una salud de hierro era comer moderadamente varios grupos de alimentos de la pirámide alimenticia. Sin embargo, en un artículo publicado recientemente en un ejemplar de la revista Newsweek afirma que la pirámide alimenticia de 1992 es imperfecta. La pirámide es demasiado simple y no realiza distinciones entre los carbohidratos buenos y los malos y de manera similar entre los lípidos buenos y malos.
El artículo titulado “la dieta perfecta” examina la Pirámide Alimenticia Saludable propuesta por Harvard. Esta nueva y mejorada pirámide desarrollada por los Doctores Stampfer y Willett del Departamento de Nutrición de la Facultad de Salud Pública de Harvard se enfoca en los alimentos individualmente, promueve los carbohidratos buenos y las grasas buenas y tiene a la actividad física y al control del peso como fundamentos
- Características de la pirámide:
En esta pirámide no indican el número de raciones que debemos tomar (pues esto dependerá del sexo, peso, talla, actividad física entre otras cosas) sino que hace especial hincapié en la calidad nutricional del alimento.
- Ejercicio físico:
La realización diaria de al menos unos 30 minutos de actividad física moderada es un factor primordial para el control de peso corporal.
- Predominio de alimentos de buena calidad nutricional:
La dieta habitual tiene que estar formada predominantemente por verduras, hortalizas, frutas y cereales integrales como fuente de hidratos de carbono , en menor medida utilizar azúcar, pasta, pan… y cualquier fuente de almidón refinada
Como fuente de grasa emplear preferentemente aceite de oliva y frutos secos en detrimento del sebo y mantecas formadas principalmente por la tan poco saludable grasa saturada.
Como fuente de proteína emplear carnes magras, huevos, lácteos desnatados y pescados azules preferentemente en lugar de carnes rojas, embutidos, chacinas…
También advierte el consumo moderado de sal y alcohol.
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